Arroz a la cubana

Cuando en alguna ocasión me preguntaban de niña, ¿qué quieres comer mañana? mi respuesta era siempre la misma: arroz blanco. En Canarias siempre lo hemos comido con plátanos fritos y para mi, en concreto, si le falta este componente carece del toque sublime. He apreciado en muchísimos peninsulares que este ingrediente no es santo de su devoción; créanme, no saben lo que se pierden.
Cuando comencé a cocinar descubrí que era un plato sencillo pero que la cocina no solo se ponía patas arriba, además, la cocinera debía tener veinte manos para que todos comieran al mismo tiempo y en caliente.  Ya he comentado en varias ocasiones que no me gustan los platos en los que no pueda comer sentada con el resto de los comensales, así que me he buscado unos sencillos trucos para ensuciar menos, no agobiarme y sentarme como una invitada a disfrutar de este manjar.
No te asustes con la abundancia del plato, es plato único, ni siquiera cabe el postre y esa noche se cena un yogur.

INGREDIENTES

Arroz blanco
2 ó 3 dientes de ajos
Huevos
Plátanos, ni muy verdes ni muy maduros.
Papas
Salsa de tomate
Pan
Chistorra, chorizo o salchichas
Aceite de oliva virgen extra

PREPARACIÓN

1. Hierve abundante agua con sal y el zumo de limón. Añade el arroz y baja algo el fuego. Remueve en un par de ocasiones durante la cocción.
2. Cuece de 12 a 15 minutos (depende de la clase de arroz).
3. Calienta el horno a unos 50º C.
4. Escúrrelo en un colador grande y pásale un poco el agua fría del grifo por encima. Reserva en el horno
5. Frie los dientes de ajo, cortados en lonchas, en 2 ó 3 cucharadas de aceite. Antes de que se doren demasiado vierte ajos y aceite sobre el arroz. Reserva en el horno.
6. Fríe, a fuego lento, en medio dedo de aceite los plátanos enteros o partidos a lo largo. Dales la vuelta una sola vez para que no se te desmoronen. Reserva en el horno.
7. Pela y corta las papas. Fríelas a fuego a lento hasta que estén casi hechas, pero no del todo. Reserva en el horno
8. Distribuye la salsa de tomate en pequeños recipientes individuales. Reserva en el horno.
9. Corta en tacos la chistorra, el chorizo elegido o las salchichas, dóralas y resérvalas en el horno.
10. Corta el pan elegido en tiras, dóralo y resérvalo en el horno 
11. Solo te queda freír los huevos y darle el toque final a las papas, para ello las fríes de nuevo a fuego fuerte hasta que queden a tu gusto.

NOTAS
* Tienes la opción de servir todo en las fuentes de horno en la mesa o de pasar las porciones a los platos de servir, en este último caso le vas añadiendo los huevos y las papas fritas correspondientes.
* Si son pocos comensales yo voy haciendo la reserva en el horno en los platos ya servidos. Saco el plato le añado los huevos y las papas y comemos todo juntos.
* Otra opción es la de calentar en el microondas a baja potencia unos 300 w lo que vas reservando.
* Procuro tener toda la cocina recogida en el momento de freír los huevos y las papas.
* Con este sistema me resulta menos engorroso hacerlo.

* En varias ocasiones ya te he comentado que procuro hacer pocos fritos (no solo por la salud) y utilizar más el microondas y el horno para que se me ensucie menos la cocina. Me horroriza recoger después de comer una cocina que esté patas arriba.

* Te habrá extrañado mi forma de preparar el arroz blanco, lo aprendí de mi hermana Mercedes y queda realmente espectacular, bien suelto. Le añado el zumo de limón para que quede más blanco.

No mido ni el agua ni el arroz, simplemente pongo mucha agua, a ojo, más del doble que de arroz, a los doce minutos lo pruebo y a partir de ahí decido si lo dejo unos minutos más o no y sigo el proceso explicado,

* Yo no frío los ajos en el fuego lo hago en un recipiente en el microondas, con aceite naturalmente, y con la tapa; otra forma de ensuciar menos.