El truco lo aprendí de Donna Hay, he publicado dos de sus recetas AQUÍ y AQUÍ, ella tiene en su cocina grandes botes de cristal con los ingredientes de más uso.
He reciclado botes de espárragos, de melocotones etc. Con variados paños de crochet y cintas diferentes los he colocado sobre uno de los armarios y no solo me han despejado enormemente el interior de mi despensa, se han convertido en un elemento decorativo. Puedes ver el resto de mi cocina y los armarios sobre los que he colocados los botes AQUÍ.
Otro truco de Donna es el de tener siempre azúcar molido, no necesariamente azúcar glas, simplemente molido, para agilizar el tiempo de batido a la hora de hacer los bizcochos o magdalenas habituales.
Allí guardó también azúcar glas casera, ya sabes que para algunas recetas es imprescindible, no vale la simplemente molida. Se hace mezclando y pulverizando en batidora 90% de azúcar normal y 10% de maicena. El resultado es magnífico y el ahorro considerable.
Me ha parecido tan práctico que he completado el conjunto con otros botes con cápsulas variadas. Encuentro perfecto el tener los diferentes modelos a la vista para ir a tiro hecho a coger las que quiero.
Como soy muy práctica tengo a mano la escalera de Ikea tuneada,
por mi para alcanzar los tarros. Puedes picar AQUÍ para ver la transformación en mi blog de DECORACIÓN
6 comentarios:
Magnifica idea!!
Me encanta tu blog, mejor dicho, tus blogs, osea que cuenta con una seguidora mas
Un abrazo
Excelente idea, ma ha encantado, tanto la idea como la decoración
http://principiantedelacocina.blogspot.com.es/
Muy buena idea para tener todo organizado y a mano, bicos
Oli, lo que daría por visitar tu casa y, especialmente, tu cocina. Creo que me volvería a Madrid con cientos de trucos en la maleta !!!
Bss
Gracias, como siempre tan amables.
Carmen: si vienes por mi isla estás invitada a algo más que un café. Encantada de conocerte en persona.
Mi querida Oli, siempre me pasa igual, vengo a tu blog y me dejo llevar de enlace en enlace y me puedo llevar horas viendo por aquí y por allí. Y aunque haya leído tus entradas anteriormente, no me importa, siempre es un gusto leerte y visitarte.
Besotes, mi niña.
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