La vajilla básica contiene platos hondos, platos llanos y platos de postre. Las vajillas más completas cuentan con un número elevado de piezas: platos y tazas de consomé, sopera, salseras, fuentes, cuencos, etc.
Aunque los bajo platos o platos de presentación no forman parte de la vajilla, cada vez se utilizan más y se consiguen de calidades y estilos diferentes.
Algunos detalles a tener en cuenta:
- Los cubiertos y la cristalería deben guardar relación con el nivel de la vajilla.
- Ha de colocarse uno sobre otro, queda encima el primero que se utiliza.
- El orden es: bajoplato (si se usa), plato llano, plato hondo o, en su lugar, taza y plato de consomé o plato para una entrada que no sea de cuchara, o plato con copa de cocktail de mariscos, por ejemplo. La variación mayor siempre la marca el primer plato. Por supuesto, se eligen en función del menú.
- Nunca se colocan, salvo excepciones, dos platos iguales juntos (dos llanos o dos juntos, por ejemplo).
- Tampoco se coloca directamente sobre el mantel o el bajoplato un plato hondo.
- La distancia entre los platos de un comensal y otro es de unos 45 cm. y separados del borde de la mesa unos 2 ó 3 dedos.
- Si se utiliza plato de pan se coloca en la parte superior izquierda, delante de los cubiertos de la izquierda.
- Las vajillas estampadas o muy decoradas impiden que la comida resalte.
- En la actualidad, se usa mucho mezclar vajillas diferentes, procurando que haya sintonía entre ellas.
- Otra opción permitida es la de presentar los alimentos en recipientes no habituales: pizarras, copas de Martini, platos soperos para postres, etc.
- He encontrado una solución para tener una vajilla completísima, elegí todo en color blanco, lo básico de una vajilla más todos los extras que voy comprando, por aquí y por allá, en muchas ocasiones de rebajas o de restos. Me he hecho con una vajilla tan completa y tan conjuntada que una vez puesta en la mesa nadie diría que la he comprado poco a poco, en mil tiendas distintas. Eso sí, como cuantos más años cumplo más me gustan los diseños actuales, procuro que todo sea liso, sin relieves, ni dibujitos de ningún tipo, con lo cual, además casa aún mejor.
- Fíjate en la mezclas que hago añadiéndole "cacharros" blancos a una vajilla básica, también blanca.
- La opción de combinar vajillas me encanta, un ejemplo de ello lo puedes ver con la combinación de la siguiente foto con la que conseguí poder actualizar una vajilla antigua. Además es una opción estupenda cuando a las vajillas empiezan a faltarles piezas.
16 comentarios:
Precioso da doble gusto comer enuna mesa así. Saludos.
No sabes lo maniática que soy con la mesa bien puesta, pero hasta la de cada día!! Me molestan los cubiertos mal puestos y las vajillas mal puestas. En casa puedo estar horas preparando una mesa de invitados con todo detalle pero también sin recargarla. Los manteles son siempre blancos, no me gutan los oscuros, prefiero poner color a unas copas o platos, pero raramente ya que soy de vajilla blanca también. Tengo la buena de color beig con tonos dorados pero es muy fina de colores. Mira si me conocen que unos amigos me regalaron un libro de protocolo en la mesa, distnacia, tipos de cubiertos etc. Cuando voy a un restaurante es lo primero en que me fijo, y los escaparates de mesas y vajillas me pierden!!! Buen post y muchas gracias!!! Besotes.
Yo uso una blanca a diario y otra de La Cartuja que me regalaron para mi boda, dorada y verde, para ocasiones especiales.
Pero cierto es que las piezas combinadas quedan maravillosamente
Un post fantástico Oli, me ha encantado.
besos guapa.
Preciosas las decoraciones de las mesas!
Bss.
Todas son preciosos, pero la verde la encuentro especialmente divertida!
Un saludo.
Mi vajilla "buena" es de fondo blanco con "cerezas" azules y hojas verdes. No es recargada, en absoluto, pero es verdad que me apetecería poner, en mis pocas ocasiones que tengo para recibir en casa, una vajilla lisa con algún toque de color en alguna pieza de servir, por ejemplo...La cuestión es que no tengo mucho sitio ni para recibir ni para guardar las vajillas que no me importaría tener. En diario utilizo una vajilla lisa de un tono beige muy pálido y tengo piezas para combinar. Si me da tiempo a poner yo la mesa suele quedar más bonita. Si son los demás (mi marido y mis hijos) no se esmeran mucho...en fin.
Bss
La cocina de Mar
http://la-cocina-de-mar.blogspot.com
Mis vajillas para cenas con visitas o para alguna celebración son blancas o crema sin ningún adorno y las de diario salvo el plato hondo también es liso, de esta manera puedo combinarlas sin ningún problema, estupendo post, seguro que a muchas nos ayudará, besos
Oli, me encantó esta entrada, ya sabes cómo adoro el buen diseño, acá en EEUU no hay tanta variedad, la gente es más práctica, en descartables, hay una cantidad de vajilla colorida. Pero, la porcelana, ahahhh. Amiga, te he dejado un ¨regalito¨ en mi blog de arte, ve a verlo, un beso,
http://architect-sensibility.blogspot.com/2011/10/regalo-mis-amigos-virtuales-gracias-por.html
A mí me vienen fenomenal estos consejos. Todavía no tengo una vajilla decente, pero todo se andará.
Un abrazo
La verdad es que una mesa bien presentada hace mucho.
El invierno pasado estuve en un curso en Ikea de decoración de mesas, y salieron unas ideas estupendas! y como bien haces tú, nosotros en casa también! compramos una vajilla básica, y poco a poco vamos incorporando nuevos elementos! :)
Besos!
No hay como una mesa bien puesta a la hora de recibir visitas. Un besito Oli.
Que bonitas todas las mesas Oli!! Estoy segura de que tú eres una anfitriona 10!!
Bicos.
A mí me apasiona el arte de la mesa! siempre la preparo con esmero e intento que quede perfecta!!
Muchas gracias por esta entrada con tantas posibilidades!!
Un beso fuerte
¡Me encanta, Oli! Tienes mucho gusto y se nota.
Besos.
Lo de combinar queda fenomenal hoy en día.
A mi me gusta la mesa bien puesta, aunque sea a diarío. Me molesta un tenedor u otro cubierto mal puesto. Manias y esas no las curan los médicos, ea.
Muy buena entrada Oli.
Besazos
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