Ensalada de champiñones con pesto

Esta entrada la tenía programada antes que la publicada el pasado viernes, sandwich de champiñones y alioli, el origen del mismo fue esta ensalada, pero alteré el orden para poder llegar a tiempo al concurso. No me resisto a ponerla hoy por el éxito que ha tenido en casa. 
Vamos poquísimas veces al año a comer fuera.  Me alegran los oídos diciéndome que como en casa no se come en ningún restaurante. Yo disfruto comiendo fuera si la comida vale la pena, pero he de reconocer que no perdono ni una. Si los amigos me invitan a comer en sus casas, ya saben que saboreo lo más simple, hasta un sencillo bocadillo; pero en un restaurante, no importa si es un chiringuito o uno de lujo, cada uno a su nivel, tiene que dar la talla.


 Los postres son para mí la prueba de fuego. Como siempre estoy a dieta, cuando pido postre fuera se me hace la boca agua pensando en exquisiteces y, claro, profunda decepción.


Todo esto viene a cuento, porque, muy de vez en vez, doy en el clavo. Hace unos cuatros años pedí esta ensalada que ya se ha convertido en un clásico en mi casa. Me olvidaba decir que siempre pido algo nuevo, algo que no sé hacer para aprender y ésta, como verás, se copia sin ninguna dificultad.

                         Sí, efectivamente son champiñones crudos.


INGREDIENTES:


Champiñones bien blancos y enteros.
Aceite de oliva virgen extra.
Queso curado.
Sal y pimienta preferiblemente blanca.


SALSA PESTO:
Un puñado grande de albahaca.
Un diente de ajo.
Aceite de oliva virgen extra suficiente para que quede como puré la mezcla.
Un puñado de piñones.
Queso parmesano recién rallado.


SI NO quieres hacerla,  utiliza salsa pesto envasada, por ejemplo, la Knorr




PREPARACIÓN:

1. Limpia los champiñones. No los laves si no es estrictamente necesario. Límpialos con un paño y corta el extremo si fuera necesario.
2. Córtalo en lonchas lo más fino que te sea posible.
3. Colócalos en el plato o bandeja de servir. Salpimienta.
4. Si haces tú la salsa pesto, tritura en primer lugar la albahaca con el diente de ajo y suficiente aceite de oliva para quede quede un puré claro. Agrégale los piñones y el parmesano, tritura de nuevo y añádele más aceite si fuera necesario.
5. Agrégale a los champiñones el pesto y un hilo de aceite de oliva virgen extra. 
6. Añádele más queso parmesano o algún otro queso curado en lonchas finas.
7. Sal pimienta.

NOTAS:
Prepara pan porque seguro que acabarás haciéndote montaditos. 
 Y como comenté con el sandwich, puedes llevártela en una fiambrera al trabajo, incluso ya aderezada, porque quedará más sabrosa.